Una meta ha sido cumplida,
mil palabras no bastarían para agradecerles:
su apoyo, su comprensión y sus consejos
en los momentos difíciles.
Gracias por haber fomentado en mí
el deseo de superación en la vida,
por compartir mis penas y mis alegrías
siempre con una palabra de aliento
para continuar luchando.
Y heme aquí convertido en profesionista
para conquistar nuevas metas y lograr
la realización personal.
A ustedes debo este logro
y con ustedes felizmente lo comparto.
Que Dios los bendiga y los guarde para siempre.